El Valdoxan me salvó la vida, salí del infierno porque la depresión es lo que es o si quieres decirlo de otra manera es la no vida. Desde por la mañana se me caía el mundo encima y solo contaba las horas para poder acostarme y dormir con mil pastillas.
Tomo 25 mg, una pastilla diaria y Lamigtal. En épocas peores como ahora en primavera aumento a 50 pero cuando me encuentro mejor vuelvo a 25. Me ayuda a coger el sueño pero no toda la noche, tengo que tomar Noctamid en gotas. Con todo ello me siento equilibrada. Mi psiquiatra quiere ya quitármelo (4 años con ello) pero me da miedo volver al infierno.
He podido volver a estudiar y no me angustia relacionarme con gente.