Me recetaron sertralina para la depresión y las crisis de ansiedad. Comencé a sentir nauseas, diarreas y aumento en estos episodios de pánico por lo que tuve que acudir a urgencias. Uno de los psiquiatras me aconsejó subir la dosis y el resultado fue peor aún. Ante esta situación tan invalidante consulté con una profesional especializada en este tipo de medicación y me dijo que no le parecía un medicamento fiable ni la dosis era la correcta. Modificó todo mi tratamiento y redujo las pautas. Ahora sí me encuentro mejor, más relajada y puedo llevar una vida aceptable.
Los medicamentos pueden ayudar pero no resuelven los problemas. Hay que acomparlos con terapias y aprender a controlar los malos momentos con ayuda y voluntad.
Pensemos que este tipo de enfermedades las sufren millones de personas porque el sistema en el que vivimos nos aboca a un estrés permanente y, de paso, los laboratorios se enriquecen más y más con sus tácticas de presión para que los médicos receten cada día sus "productos químicos". Con ellos nos adormecen y no damos la lata. Su dependencia anula la capacidad de reaccionar y pensar. Sólo nos obsesiona dormir bien o sentirnos "normales". Imposible, con estos medicamentos acabaremos como zombies con fallos en todos los órganos aunque nuestros sueños sean apacibles a la larga.
Todo esto no es más que un inmenso negocio a costa de nuestra salud. Hay otras alternativas no agresivas y más gratificantes para uno mismo.
Por cierto, y aunque no tenga nada que ver con el tema, yo también pediría un pequeño esfuerzo para que escriban mejor. Hay comentarios en este foro que son casi imposibles de entender.
Saludos y gracias.