Después de estar un tiempo con una sonda en la uretra (por una operación en la vejiga u otro tratamiento similar), siempre quedan molestias, escozor y urgencia para orinar, durante una o dos semanas. Es completamente normal, al margen de que exista o no un problema con la próstata.
Utilizamos cookies propias y de terceros para mejorar nuestros servicios y mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias según tus hábitos de navegación. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso. Más detalles
Después de estar un tiempo con una sonda en la uretra (por una operación en la vejiga u otro tratamiento similar), siempre quedan molestias, escozor y urgencia para orinar, durante una o dos semanas. Es completamente normal, al margen de que exista o no un problema con la próstata.